Nutrición para el embarazo
El embarazo puede ser un momento muy emocionante, pero también puede ser un momento lleno de incógnitas e incertidumbre. Hay muchas decisiones que tomar durante el transcurso del embarazo.
Una nutrición adecuada es esencial tanto para la madre como para el bebé, pero saber qué comer durante el embarazo puede resultar muy confuso. Los nutrientes que se le suministran a tu bebé deben provenir de los alimentos que se ingieren, de lo contrario, los tomará del cuerpo de la madre propio. Este agotamiento de las reservas puede tener muchas consecuencias desafortunadas para la salud.
Una nutrición adecuada también puede ayudar a reducir la fatiga, estreñimiento, acidez estomacal, cambios de humor, preeclampsia, anemia, diabetes gestacional. , depresión posparto y más.
Nutrir el embarazo ayudará al bebé a desarrollar huesos sólidos, una inmunidad fuerte y tejidos y órganos sanos. También es posible reducir el riesgo de defectos de nacimiento, bajo peso al nacer, alergias, afecciones como eccema o asma y muchos problemas de salud potenciales en el futuro.
Nutrición para el postparto
Gran parte de la atención de una nueva madre se centra en su pequeño bebé al principio, ¡pero es muy importante que también se cuide a una nueva madre! Su salud también debe ser una prioridad para que tenga la energía y la claridad para su nuevo papel en la maternidad.
Durante el embarazo, el cuerpo está completamente dedicado al bebé, pero tomarse el tiempo para ser consciente de su propia nutrición una vez que llega el bebé no es egoísta, es necesario.
Ya somos conscientes de que el nuevo miembro de la familia le ha robado toda la noche de sueño, pero ¿sabía que el embarazo y la lactancia también podrían agotar las reservas de nutrientes de su cuerpo? Después del embarazo, se es más susceptible a sufrir anemia, osteopenia, fatiga y depresión. Un plan de nutrición práctico e individualizado ayuda a equilibrar el cuerpo de forma segura mientras se reponen las reservas.
Si esta amamantando, lo que se come también puede afectar directamente la calidad de la leche materna. Consumir una dieta rica en nutrientes enriquecerá la leche con los nutrientes necesarios para ayudar a que el cerebro y el cuerpo del bebé crezcan y se desarrollen.